Versículos Sobre El Agua – ¡Descubre la Palabra de Dios acerca del agua!
1. Génesis 1:6-7 – «Dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así».
2. Génesis 1:9-10 – «Y dijo Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno».
3. Éxodo 14:21-22 – «Entonces Moisés extendió su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento del este toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas. Y los hijos de Israel entraron por en medio del mar, en seco, teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda».
4. Job 38:34 – «¿Has levantado tú a tu voz las nubes, y las multitudes de aguas te han cubierto?».
5. Salmos 42:1 – «Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía».
6. Salmos 65:9 – «Tú visitas la tierra, y la riegas; en gran manera la enriqueces; con el río de Dios, lleno de aguas, preparas el grano de ellos, cuando así la dispones».
7. Salmos 93:4 – «Jehová en las alturas es más poderoso que el estruendo de las muchas aguas, más que las recias ondas del mar».
8. Salmos 104:10 – «El hace que los manantiales broten en los valles; van entre los montes».
9. Proverbios 25:25 – «Como agua fría para el alma sedienta, así son las buenas nuevas de lejanas tierras».
10. Isaías 43:2 – «Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti».
11. Isaías 44:3 – «Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos».
12. Isaías 58:11 – «Y Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan».
13. Jeremías 2:13 – «Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua».
14. Jeremías 17:8 – «Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto».
15. Jeremías 31:9 – «Con llanto vendrán, y con misericordias los haré volver; y los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino derecho en el cual no tropezarán; porque soy a Israel por padre, y Efraín es mi primogénito».
16. Ezequiel 47:9 – «Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y sanarán; y vivirá todo lo que entrare en este río».
17. Zacarías 14:8 – «Acontecerá también en aquel día, que saldrán de Jerusalén aguas vivas, la mitad de ellas hacia el mar oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en verano y en invierno».
18. Mateo 3:11 – «Yo a la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene tras mí, cuyo calzado yo no soy digno de llevar, es más poderoso que yo; él os bautizará en Espíritu Santo y fuego».
19. Mateo 10:42 – «Y cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente, porque es discípulo, de cierto os digo que no perderá su recompensa».
20. Mateo 14:25 – «Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar».
21. Juan 4:14 – «El que beba del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna».
22. Juan 7:37-38 – «En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva».
23. Hechos 8:36 – «Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aquí hay agua; ¿qué impide que yo sea bautizado?».
24. Romanos 6:4 – «Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva».
25. 1 Corintios 12:13 – «Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu».
26. Efesios 5:26 – «para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra».
27. Hebreos 6:2 – «de la doctrina de bautismos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno».
28. Santiago 3:11 – «¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga?».
29. Apocalipsis 7:17 – «porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos».
30. Apocalipsis 22:1 – «Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero».
Versículos Sobre El Agua – ¡Déjate cautivar por la Palabra de Dios acerca del agua!
31. Génesis 7:6 – «Trescientos años vivió Noé, después que nacieron sus hijos, y engendró hijos e hijas».
32. Génesis 8:13 – «Y sucedió que en el año seiscientos uno de Noé, en el mes primero, el día primero del mes, las aguas se secaron sobre la tierra; y quitó Noé la cubierta del arca, y miró, y he aquí que la faz de la tierra estaba seca».
33. Génesis 9:11 – «Estableceré mi pacto con vosotros, que no será ya exterminada toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra».
34. Éxodo 17:6 – «He aquí yo estaré delante de ti allí sobre la peña en Horeb; y golpearás la peña, y saldrán de ella aguas, y beberá el pueblo. Y Moisés lo hizo así en presencia de los ancianos de Israel».
35. Números 20:8 – «Toma la vara, y reúne la congregación, tú y Aarón tu hermano, y hablad a la peña a vista de ellos; y ella dará su agua, y les sacarás aguas de la peña, y darás de beber a la congregación y a sus bestias».
36. Deuteronomio 8:7 – «Porque Jehová tu Dios te introduce en la buena tierra, tierra de arroyos, de aguas, de fuentes y de manantiales, que brotan en vegas y montes».
37. Josué 3:17 – «Y los sacerdotes que llevaban el arca del pacto de Jehová, estuvieron en seco, firmes en medio del Jordán, mientras todo Israel pasaba en seco, hasta que todo el pueblo acabó de pasar el Jordán».
38. 2 Reyes 5:14 – «Y descendió y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio».
39. Nehemías 8:1 – «Cuando llegó el séptimo mes, y estando ya los hijos de Israel en las ciudades, se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual Jehová había dado a Israel».
40. Job 14:19 – «Las aguas desgastan las piedras, las inundaciones se llevan el polvo de la tierra; así haces tú perecer la esperanza del hombre».
41. Salmos 1:3 – «Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace, prosperará».
42. Salmos 18:16 – «Y aparecieron los abismos de las aguas, y quedaron al descubierto los cimientos del mundo, a tu reprensión, oh Jehová, por el soplo del aliento de tu nariz».
43. Salmos 23:2 – «En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará».
44. Salmos 29:3 – «Voz de Jehová sobre las aguas; truena el Dios de gloria; Jehová sobre las muchas aguas».
45. Salmos 42:7 – «Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas; todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí».
46. Salmos 65:12 – «Las pasturas del desierto destilan, y los collados se ciñen de alegría».
47. Salmos 66:6 – «El convirtió el mar en tierra seca; atravesaron el río a pie; allí en Él nos alegramos».
48. Salmos 68:9 – «Derramaste lluvia de beneficencia, oh Dios; confirmaste tu heredad, cuando estaba cansada».
49. Salmos 77:19 – «Tu camino fue por el mar, y tus sendas por las muchas aguas; y tus pisadas no fueron conocidas».
50. Salmos 107:35 – «Y convierte el desierto en estanques de aguas, y la tierra seca en manaderos de aguas».