Todo es tan incierto ahora mismo, y necesito desesperadamente Tu paz.
Señor, hoy te pido Tu ayuda e intervención en esta situación. Mientras anticipo respuestas y tratamientos, por favor recuérdame que me concentre en Ti en vez de en el problema.
¡Ningún diagnóstico es demasiado difícil para Ti!
¡Ningún milagro o sanación está más allá de lo que Tú puedes hacer!
Por favor, aumenta mi fe y aumenta mi confianza en ti.
Por favor, hazte presente en el cuidado de mi ser querido. Te pido que guíes las manos de los doctores y enfermeras que lo están cuidando. Ilumínalos para que puedan administrar el tratamiento exacto que necesita.
Señor, Tú sabes que mi deseo es ver su buen estado de salud en un futuro próximo mientras mi ser querido se recupera.