Salmos 91:5 – «No tendrás temor de los terrores nocturnos, ni de la flecha que vuela de día.»
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy quiero compartir con ustedes la maravillosa promesa que encontramos en Salmos 91:5. Esta poderosa palabra nos habla del amor y la protección de nuestro Dios en todo momento, incluso en medio de las adversidades más oscuras y aterradoras.
En estos tiempos inciertos y llenos de miedo, es inevitable que nos sintamos amenazados por los peligros que nos rodean. La violencia, la enfermedad y la incertidumbre parecen acechar en cada esquina. Sin embargo, el Salmo 91 nos recuerda que no debemos temer, porque nuestro Dios está con nosotros.
«No tendrás temor de los terrores nocturnos», estas palabras son un bálsamo para nuestras almas inquietas. ¿Cuántas veces hemos sentido miedo cuando la noche cae y la oscuridad parece envolvernos? Tal vez, hemos experimentado noches de insomnio llenas de preocupaciones y angustias. Pero debemos recordar que Dios está presente en medio de nuestras noches más oscuras. Él es nuestra luz en medio de la oscuridad, nuestra fortaleza cuando nos sentimos débiles.
Además, el Salmo 91 nos dice que «no tendrás temor…ni de la flecha que vuela de día». Las flechas pueden representar los ataques del enemigo, las dificultades y las pruebas que enfrentamos en nuestra vida diaria. Pero, ¿saben qué? Nuestro Dios es nuestro escudo y protector. Él nos guarda de todo mal y nos libra de cualquier peligro que intente acercarse a nosotros.
Queridos hermanos y hermanas, esta promesa de Dios es para todos nosotros. No importa cuán grande sea el desafío que enfrentemos, no importa cuán oscuro sea el panorama que se presente ante nuestros ojos, podemos aferrarnos a la certeza de que Dios está con nosotros. Él nos sostendrá y nos llevará a través de cualquier situación que enfrentemos.
En estos momentos de incertidumbre, es normal que el miedo intente invadir nuestro corazón. Pero debemos recordar que el miedo no proviene de Dios, sino del enemigo. Dios nos ha dado un espíritu de poder, amor y dominio propio (2 Timoteo 1:7). Por lo tanto, podemos enfrentar cualquier situación con confianza y valentía, sabiendo que nuestro Dios nos protege y nos guarda en todo momento.
¿Qué podemos hacer para vivir en la realidad de esta promesa? Primero, debemos estar arraigados en la Palabra de Dios. Leamos y meditemos en Salmos 91:5, dejando que sus palabras llenen nuestros corazones de paz y confianza. También, debemos orar y pedir a Dios que nos fortalezca y nos ayude a vencer cualquier temor que intente apoderarse de nosotros.
Además, recordemos que el Salmo 91 no solo nos habla de la protección física, sino también de la protección espiritual. Nuestro Dios es nuestro refugio y nuestro abrigo seguro en medio de las tormentas de la vida. Él nos guarda de los ataques del enemigo y nos da fortaleza para resistir cualquier tentación que se presente.
Hermanos y hermanas, no importa cuán difícil sea la situación que enfrentemos, no importa cuán intensa sea la batalla que libremos, podemos confiar en que Dios está con nosotros. Sus promesas son verdaderas y su amor es inquebrantable. Así que, recordemos siempre Salmos 91:5: «No tendrás temor de los terrores nocturnos, ni de la flecha que vuela de día».
En conclusion, hermanos y hermanas, dejemos que esta poderosa promesa de Dios nos llene de esperanza y confianza. No importa cuán oscuro sea el camino que estemos atravesando, Dios está con nosotros y nos protege en todo momento. Aferrémonos a su Palabra y enfrentemos cualquier situación con fe y valentía. Que Salmos 91:5 sea nuestro recordatorio constante de la presencia y el cuidado amoroso de nuestro Dios. ¡Amén!
Salmos 91:5 – «No tendrás temor de los terrores nocturnos, ni de la flecha que vuela de día.»