Conéctate Con Dios

Refugio eterno: Salmos 121:7-8


Salmos 121:7-8 (RVR 1960) declares: «Jehová te guardará de todo mal; él guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre». Estas poderosas palabras nos llenan de confianza y nos recuerdan que Dios siempre está con nosotros, protegiéndonos y cuidando de cada aspecto de nuestras vidas.

En este mundo lleno de incertidumbre y peligros, es fácil sentir miedo y ansiedad. Sin embargo, la promesa de Dios en Salmos 121 nos asegura que no estamos solos. Él es nuestro protector constante, velando por nuestra seguridad y nuestro bienestar.

Cuando enfrentamos desafíos y dificultades, podemos confiar en que Dios nos guardará de todo mal. No importa cuán grandes sean nuestras preocupaciones o cuán amenazante sea la situación, el Señor es nuestro refugio seguro. Él nos cubre con su amor y nos rodea con su poder. Nada puede dañarnos cuando estamos bajo su cuidado.

Además, Salmos 121 nos enseña que Dios guarda nuestra alma. Él se preocupa por nuestro ser interior, nuestro corazón y nuestra alma. Nos brinda consuelo y paz en medio de cualquier tormenta. Cuando nos sentimos abrumados por el estrés o la tristeza, podemos encontrar refugio en su presencia y confiar en que Él nos restaurará.

No solo Dios nos guarda en momentos de dificultades, sino que también protege nuestra salida y nuestra entrada. Esto significa que Él está presente en cada etapa de nuestras vidas, desde el principio hasta el final. Él nos acompaña en nuestras salidas, cuando enfrentamos nuevos desafíos y oportunidades. Y también está allí en nuestras entradas, cuando regresamos a casa o experimentamos cambios importantes en nuestras vidas. No importa dónde vayamos o qué hagamos, Dios siempre nos acompaña y nos guía.

El Salmo 121:7-8 nos asegura que esta protección divina es eterna. Desde ahora y para siempre, Dios está con nosotros. Su amor y cuidado son inquebrantables. Podemos tener la certeza de que nunca nos abandonará y siempre nos sostendrá en sus brazos amorosos.

En momentos de temor o duda, recordemos estas palabras poderosas del Salmo 121:7-8. Que sean un recordatorio constante de que Dios está con nosotros, protegiéndonos en todo momento. No importa cuán oscuro sea el camino que estemos caminando, Él es nuestra luz y nuestra fortaleza.

Así que, amados hermanos y hermanas, confiemos en la promesa de Dios en Salmos 121:7-8. Sepamos que Él nos guarda de todo mal, guarda nuestra alma y protege nuestra salida y nuestra entrada. No hay mayor seguridad que estar bajo el cuidado del Todopoderoso.

Que esta verdad nos llene de paz y nos inspire a vivir confiados en la protección y el amor de nuestro Dios. No importa qué desafíos enfrentemos, Él es nuestro refugio y fortaleza. A Él sea toda la gloria y la alabanza.

Salmos 121:7-8 (RVR 1960): «Jehová te guardará de todo mal; él guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre».

Salmos 121:7-8 (RVR 1960): «Jehová te guardará de todo mal; él guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre».

Salmos 121:7-8 (RVR 1960): «Jehová te guardará de todo mal; él guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre».